El verano es una estación que nos encanta porque el bronceado nos hace vernos más favorecidos y con una aparente buena cara y estado saludable, pero la realidad es que a pesar del mayor o menor bronceado que tengamos, nuestra piel pierde mucha luz. Es por esto que la rutina de verano, y la de ahora (otoño-invierno), es muy importante. El objetivo es conseguir una piel luminosa. Si eres de manchas, ahora estarán revolucionadas y es crucial actuar con la cosmética adecuada, pues las manchas habrán apagado mucho la luz de tu rostro. Para esto son efectivos los cosméticos con principios activos como la arbutina, ácido kójico, azelaico, niacinamida, vitamina C y retinol, combinados con otros que tengan poder exfoliante como el ácido glicólico, el salicílico y el ácido fítico. Una vez más recomiendo el exfoliante físico a modo de scrub suave para ayudar a la renovación celular.