Después del verano y tras las vacaciones llega el momento de mantener nuestro moreno el mayor tiempo posible. Esto nos ayudará a lucir mejor y nos recordará días de playa y atardeceres interminables.

Aunque la mayoría piense que al exfoliar la piel se nos va nuestro color moreno la realidad es que conseguimos quitar esas células muertas y que nuestra piel esté más luminosa. Es importante hidratarnos para que la epidermis no se seque y perdure en buen estado.

Con ayuda de los autobronceadores conseguiremos prolongar las sensaciones del verano.