Beatriz Lecuona y Óscar Hernández son artistas plásticos. Llevan trabajando más de veinte años y han participado en más de un centenar de exposiciones colectivas e individuales. Cuentan con obra en galerías de Madrid, Lima y en Santa Cruz de Tenerife y Las Palmas de Gran Canaria. Abarcan distintas disciplinas y han comisariado y dirigido numerosas muestras y proyectos. Desempeñan, también, respectivamente, tareas docentes en la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de La Laguna y en Bachillerato Artístico.
En la actualidad, exponen Cuestiones Vivas en el Espacio Cultural Solar de Santa Cruz de Tenerife y en la colectiva Broken Line en la Galería Lucía Mendoza de Madrid tras exhibirse en el Colegio Oficial de Arquitectos de Tenerife, La Gomera y El Hierro. En esta exposición, que comisarían, participan artistas canarios e iberoamericanos con experiencia en eventos de primer nivel, como las bienales de Venecia, La Habana y Sao Paulo. En general, subrayan, reúnen diferentes perfiles que «conforman un relato sumativo que reporta una experiencia sobre múltiples miradas que convergen».
«Hay que eliminar las barreras, suprimir las fronteras. Abogamos por quebrar las líneas y abrir el espacio»
La pareja tinerfeña asevera que se siente cerca y lejos de todo porque se siente conectada con el Mundo. Ha vivido en Brasil, Lima y viaja constantemente. «Vivir aislado es sentirte fronterizo», destaca Óscar Hernández.
Presentan un discurso en donde tienen claro, tras un proceso común de pensamiento con otras personas creadoras, que el arte ha estado determinado por una cultura heteropatriarcal, hegemónica, colonizadora e imperialista. Así, apuntan que una parte piensa como periferia porque existe un centralismo que también se lo cree, y que las tornas deben cambiarse. «Debemos repensar ese patrón», asientan, para añadir que esta nueva configuración pasa por la revolución: «Ser artista es un acto revolucionario. El día a día es descubrir posibilidades, aperturas, cerramientos».
Beatriz Lecuona afirma que el arte te permite repensar la realidad en toda su extensión y «aunque en cierta forma es una entelequia con él puedes aproximarte al ruido que hay en el ambiente. Es como ir a la caza de algo que sabes, intuyes, que está ahí. Por eso hay que pensarlo y emocionarte con él».
Y Beatriz Lecuona viste para FAMA de princesa porque está cansada de tener que justificar por qué le gusta divertirse con la ropa: «Con el acto de vestir interpretas múltiples yoes. No solo tenemos una cara. Somos prismas poliédricos y vestirte de diferentes formas es divertido y emocionante. Hay que eliminar las barreras, suprimir las fronteras. Abogamos por quebrar las líneas y abrir el espacio. Estoy un poco harta y cansada de la norma y de las jaulas de presencia».
Fotografía: David Gil
Estilismo Beatriz Lecuona: Juan M. Mora Yanes
Vestido vintage: @estudio_capsula
Joyería: @pilarcotter, @numengarachico
Obra: Segundo origen. Cuestiones vivas. Lecuona y Hernández en comunidad
Localización: Espacio Cultural Solar, Santa Cruz de Tenerife
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