En el rostro de la artista una mariposa se posa. Es una mariposa diurna que vuela de flor en flor bajo el sol. Por la noche se esconde, cierra sus alas, duerme. Como duerme Fayna PRZ, frágil como una cerámica china. No la toques. Podría romperse. «Ay, mariposa de amor», canta el maná que cae del cielo.