Fotografía / Joaquín Santacreu
La actriz Silvia de Esteban disfruta de sus cincuenta años llena de vitalidad y energía positiva. Después de ocho años residiendo en Miami ha decidido regresar a su Tenerife natal donde tendrá su base de operaciones, pues piensa seguir viajando para trabajar.
Se fue de la Isla con 17 años, ha dado millones de vueltas y ha cumplido muchos sueños, pero ahora, confiesa, «me apetece vivir más tranquila y disfrutar del amor y la familia. Creo que me lo merezco y estoy feliz de haber tomado esta decisión». Observa, eso sí, que continuará con su carrera, escribiendo, actuando, dirigiendo y creando todo lo que pueda.
Apunta, además, que se siente orgullosa de haber llegado a los cincuenta y sentirse tan plena y feliz. «Los años, las vivencias y experiencias me han hecho ser quien soy hoy, y estoy contenta. Me quedan otros cincuenta para seguir cumpliendo sueños», afirma.
La actriz dice que si parara de crear se oxidaría. Siempre tiene dos o tres proyectos en la cabeza y según los va haciendo surgen otros nuevos. El más inmediato es La vida de colores, «teatro social con un mensaje potente sobre la violencia machista. Falta todavía mucha educación al respecto y creo que todo lo que hagamos desde cualquier plataforma para educar a nuestra sociedad es positivo».
«Las vivencias y experiencias me han hecho ser quien soy hoy, y estoy contenta»
Otro proyecto que tiene entre manos es un documental que ya está en periodo de edición sobre la donación de médula ósea que hizo en 2019. Lo documentó con el fin de mostrar el proceso y «contarle a la gente que donar médula es una opción preciosa para salvar una vida». Para Silvia de Esteban saber que el receptor de su médula vive recuperado y feliz la hace la mujer más feliz del Mundo. «Pronto lo empezaremos a mostrar y ojalá llegue a mucha gente», asienta.
También trabaja en el libro Miss decisiones, basado en las determinaciones que ha ido tomando en su vida y que la han llevado a donde está hoy, física e interiormente. De esta obra, indica, saldrá su siguiente espectáculo para teatro, una colaboración con Edui Tijerina, escritor mexicano afincado en Houston («Todo un reto»).
El año 2020 no fue especialmente agradable para la tinerfeña pues le diagnosticaron cáncer de mama. Señala que fue muy duro, pero que, por suerte, «vino a mi sólo de visita y espero que no vuelva nunca más». Ahora se encuentra bien, sigue en tratamiento y cuidándose. «Todo lo que quiero es disfrutar de la vida y seguir», asevera con una gran sonrisa.
Tras la enfermedad, Silvia de Esteban subraya que ni el trabajo ni los compromisos son más importantes que la salud y el amor, premisas claras que espera se mantengan en 2022. Seguro que sí.
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