«La vivienda, levantada en una parcela de 2750 metros cuadrados, está construida bajo los máximos estándares de calidad y confort»
En los acantilados de Santa Úrsula sobresale esta vivienda unifamiliar con vistas fascinantes sobre el mar, el Valle de La Orotava, el Puerto de la Cruz y el Teide, que corona el paisaje.
Situada a 330 metros de altitud sobre el mar, en una parcela de 2750 metros cuadrados, la propiedad, de 1220 metros cuadrados, está construida bajo los máximos estándares de calidad y confort, y con todo lujo de detalles: piscina climatizada de trece metros de largo por cinco metros de ancho y tecnología de ozono (sin cloro), terraza que simula una playa artificial de arena, jardín con vegetación tropical, sala de recreo con mesas de hockey, futbolín, billar, tenis de mesa y dardos, bar para los invitados, barbacoa al aire libre, zona de sauna y gimnasio.
La casa, con cinco dormitorios, siete baños y un apartamento, cuenta con suelos de mármol, aire acondicionado, wifi y calefacción en todas sus dependencias.
Terraza, piscina, jardín y zonas de juego, ideales para interactuar, relajarse y disfrutar. 
La disposición armoniosa de la vivienda encaja a la perfección con el paisaje del norte de Tenerife. 
La casa aprovecha la longitud de la parcela para ubicar todas las dependencias, que se orientan hacia las mejores vistas. De esta forma, se crea un gran efecto escénico. 
Fotografía: Manuel Caraballo / IZADI
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