Idaira Santana, Mayte Suárez, África Álvarez e Isabel González. Fotografía / SuAr
La Asociación de Profesionales por la Lactancia Materna en Canarias (LactaCanarias) surgió en 2019 con el objetivo de fomentar la lactancia materna de forma unificada evitando informaciones contradictorias y confusas, aportando y facilitando formación a los profesionales y así mejorar las tasas de lactancia materna en Canarias.
La directiva de la Asociación está integrada por África Álvarez, especialista en Medicina Familiar y Comunitaria del Servicio Canario de Salud (SCS); Isabel González, enfermera pediátrica del Área de Salud de La Palma y consultora certificada en Lactancia; Idaira Santana, matrona del Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria y consultora certificada en Lactancia, y Mayte Suárez, enfermera de Pediatría del SCS.
Más de 450 profesionales apoyan la iniciativa de LactaCanarias con un alto grado de participación, compromiso, accesibilidad y respuesta rápida a la resolución de dudas, además de contar con el reconocimiento en las instituciones o asociaciones que protegen, promueven y apoyan la lactancia materna. La información dada por LactaCanarias en cursos y jornadas cumple con los objetivos de apoyo, promoción y protección de la lactancia materna en el ámbito sanitario.
«Es positivo que se normalice dar el pecho. Es lo natural»
Según apunta Mayte Suárez, «antes lo habitual era ver amamantar a madres, tías, vecinas. Hoy en día se ve poco, por lo tanto, es positivo que se normalice dar el pecho. Es lo natural». Por eso, añade que «es necesario crear una red de apoyo sociocultural en torno a la lactancia materna, formar tribu». Sobre esta cuestión, África Álvarez señala que «esto se consigue con el acompañamiento madre a madre en los grupos de apoyo a la lactancia con los que debemos trabajar mano a mano». No obstante, subraya que aunque en el mundo de la sanidad existe un fomento de la lactancia materna como actividad de promoción para la salud, «sí creemos que hay una escasa formación académica en el abordaje de situaciones de riesgo en lactancia materna que puede llevar a tomar decisiones erróneas o dar información no veraz a la madre».
Mar acaba de cumplir cuatro años y todavía pide la teta de su madre, la médica África Álvarez. Eso sí, hace un par de meses que no se la da por la noche porque necesitaba dormir mejor. La lactancia de la doctora se prolonga ya durante seis años pues empató esta segunda con la de su hijo mayor, Leo, de seis años. Pero no supone mayor problema: «Deseo hacerlo y siempre he contado con el apoyo de mi familia y entorno». A estas edades, dice África, la frecuencia de dar el pecho es muy variable: «Desde una vez al día para dormirse hasta varias veces porque está malita».
LactaCanarias trata de concienciar de que la leche materna es el alimento más adecuado para el bebé. «Es un fluido vivo, complejo, de gran valor inmunitario y alto valor nutritivo, tanto que disminuye el riesgo de padecer ciertas enfermedades», afirma Isabel González. Al respecto, África Álvarez asevera que no solo obtiene beneficios la criatura (desarrollo cognitivo, desarrollo fisiológico e inmunológico), sino también la madre: disminución del sangrado posparto, recuperación del tamaño uterino o disminución de sufrir cáncer de mama premenopáusico. Junto a estas ventajas, ultima la doctora, existen beneficios económicos (menos gastos en artículos de biberón, leche fórmula), familiares (vivencia única, especial placentera) y medioambientales (menos desechos).
«Las madres que desean amamantar se sienten juzgadas y poco apoyadas a nivel social»
Mayte Suárez resalta que al perderse la cultura del amamantamiento «se han ido trasmitiendo mitos e informaciones erróneas y contraproducentes». En este sentido, dice que «pese a que la edad del destete está entre los tres y seis-siete años, en la actualidad las madres que desean mantener la lactancia se ven juzgadas y poco apoyadas por la sociedad».
En España y resto de países existen numerosas asociaciones públicas y privadas que promueven y apoyan la recuperación de la cultura de la lactancia. Incluso, hay colectivos integrados por madres que ofrecen ayuda técnica de primera mano, conocimientos adquiridos a partir de la experiencia y apoyo a otras madres en temas de crianza. Un ejemplo de ello en las Islas es la Asociación Canaria Pro Lactancia Materna.
Marisol Méndez vive en Tamaimo, Santiago del Teide, es camarera, está embarazada y le da el pecho a su pequeña Aurora de tres años. La próxima nueva maternidad hace que dentro de unos meses valore dar la teta en tándem, «pues mientras Aurora quiera seguiré dándole el pecho». Confiesa que aunque lo lleva bien, «a veces es un poco agotador». Afirma que siempre ha dado el pecho a demanda, pero que, en la actualidad, «Aurora solo toma para dormir o cuando está malita». Subraya que hay gente que no entiende que dé la teta después del año y más si es madre joven.
Idaira Santana advierte que «amamantar es fácil cuando te han enseñado a hacerlo. El bebé es un mamífero que sí sabe lo que tiene que hacer. Las que a veces dudan de su capacidad de lactar son las madres, pero eso es algo que se aprende. Por ejemplo, para evitar la aparición de grietas lo más importante es conseguir la colocación correcta del bebé al pecho. De ahí la importancia de que las madres se formen desde su embarazo y ante cualquier problema consulten con especialistas en lactancia». Sin embargo, considera que poco son los casos en donde se desaconseja la lactancia y que «se debe tomar conciencia en apoyar a las madres con lactancias de riesgo».
Isabel González ultima que desde el primer momento la madre tiene derecho a tomar una decisión informada y libre sobre la alimentación y crianza de sus hijos, y que una vez tomada la decisión «es fundamental mostrar todo el apoyo y respeto, y dar la ayuda necesaria por parte de quien atiende a esa familia».
Comentarios recientes